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Origen
Por primera vez se habló de gatos con patas cortas a principios del siglo XX; estos animales se encontraban en Europa, Estados Unidos e incluso Rusia. Sin embargo, en aquel momento la longitud inusual de las patas se consideraba una anomalía y se asociaba con las difíciles condiciones de vida de los gatos.
Se considera que el año oficial de aparición del munchkin es 1983; entonces, la profesora de música estadounidense Sandra Hochenedel protegió a una gata preñada de patas cortas, a la que llamó Blackberry. Después de un tiempo, el animal dio a luz a crías; los bebés que nacieron también tenían patas cortas. Sus gatitos se convirtieron en los primeros representantes de la nueva raza.